A la espera de juicio, Peluquerías Low Cost sigue funcionando, aunque ahora con un nuevo nombre e imagen renovada. David, acusado de estafa, sigue al frente del negocio y es el administrador y accionista único de la empresa propietaria. Equipo de Investigación trata de localizarle en las oficinas centrales de la marca, donde vemos el coche de alta gama -un Maserati- que, según los franquiciados de la cadena, David se había comprado.

Él, sin embargo, rechaza responder a las preguntas del programa sobre la causa en la que está investigado y por qué los contratos de las peluqueras de sus franquicias eran de formación. "A mí no me grabes", se limita a repetir. Puedes ver el momento en el vídeo que ilustra estas líneas.