Ya alertó la Policía de que la la venganza entre bandas juveniles era cuestión de tiempo. Por ello, las Fuerzas de Seguridad las vigilan de cerca, y les preocupa que sus soldados son cada vez más jóvenes. Además, desde la pandemia, el número de adolescentes que se han unido a estas pandillas violentas se ha duplicado.

"Están en todos lados, parques, barrios... El problema es que cada vez son más niños y no tienen respeto hacia nada. Tú te puedes cruzar con dos y que no te digan nada, o cruzarte con diez y que te revienten vivo", advierte un joven, respondiendo a preguntas de Equipo de Investigación.