Equipo de Investigación ha viajado hasta Portugal para ser testigo de cómo combate la Policía Marítima portuguesa el tráfico ilegal de almejas. Los agentes muestran al programa un mapa con la zona de capturas de bivalvos en Portugal, diferenciado en amarillo y rojo en las zonas en las que el agua está contaminada y las almejas pueden ser tóxicas.

Según ha indicado un agente a Equipo de Investigación, estos moluscos son transportados en coches, camiones o furgonetas a España, sin ningún tipo de condición higiénico-sanitaria. De hecho, cada año intervienen más de 100 toneladas de almeja, potencialmente tóxica, con destino a España.

El equipo del programa ha acompañado en una operación a los agentes por el río Tajo, que dan el alto a un pequeño barco pesquero. Allí encuentran jaulas, pero sin almejas, porque un chivatazo ha frustrado la operación. "Son una mafia que lo tienen todo controlado. Tienen vigilantes que avisan a los mariscadores y cuando son interceptados por nuestra lancha, tiran por la borda el material que pueda comprometerlos", han explicado.