Mientras la familia Morchón espera el juicio por la trama de los ataúdes que presuntamente cambiaban para volver a venderlos, su negocio funerario sigue en marcha. La empresa sigue ofreciendo sus servicios en ocho tanatorios situados en distintos puntos de Valladolid e incluso está construyendo otros tres. Equipo de Investigación se desplaza hasta uno de ellos, donde aseguran que la familia no va a querer hablar.
Sin embargo, el heredero de los Morchón, Ignacio, investigado por constitución de organización criminal, apropiación indebida, delito continuado contra el respeto a los difuntos y blanqueo de capitales, sorprendió en su declaración ante el juez al descargar la responsabilidad de la gran estafa funeraria en su padre, ya fallecido. Pasó tres meses en prisión y salió con una fianza de 800.000 euros, mientras 43 propiedades de la familia en Valladolid, Salamanca y Cantabria están embargadas hasta que se celebre el juicio.
Equipo de Investigación localiza a Ignacio Morchón en el centro de Valladolid y le aborda: ¿quién ordenaba realmente los cambios de féretros? Puedes ver el momento en el vídeo que ilustra estas líneas.
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