Onlyfans es el mayor escaparate erótico de internet. En la plataforma más de tres millones de personas de todo el mundo venden su contenido; el 97% son mujeres. Para suscribirse a cuentas, el usuario tiene que introducir los datos de una tarjeta de crédito y confirmar que es mayor de edad.

Cada creador de contenido puede poner el precio que quiera a su suscripción. Cecilia Sopeña ha explicado a Equipo de Investigación que "hay usuarios que tienen 200.000 seguidores por suscripciones de 5,99 al cabo del mes, y al cabo del año es muchísimo dinero".

Onlyfans limita el uso de armas de fuego, de drogas, las autolesiones, el incesto, la violencia, la necrofilia o la zoofilia; y normalmente su mayor fuente de atracción tiene origen en otras redes sociales, como Instagram o TikTok.