Edgar se convirtió en el principal sospechoso de la desaparición de Aurora Mancebo por su incoherencia en sus versiones. Cuatro días antes de su desaparición, la joven había pasado la noche de fiesta con él. Sin embargo, mantenía que se conocieron en ese mismo instante. Los investigadores, en cambio, comprueban que habían estado en el mismo centro psiquiátrico.

Aurora, además, se había llevado una Biblia de su casa el día de su desaparición. Un elemento clave en la investigación. "Está dicho por varios testigos que hablaban de ángeles, de biblias... Eso es lo que les puede llevar a muchas personas a pensar si querían hacer un aquelarre o algo así, pero yo creo que simplemente quería atraerla a un mundo que sólo fuese el suyo para poder hacerle lo que quiera", ha aseverado el comisario Ángel Galán.

Era la persona en la que los agentes creen que giraba toda la felicidad de Aurora en sus últimas semanas. Por eso, los agentes indagaron en la vida de Edgar en El Morell, el pueblo de 3.700 habitantes donde nació la familia del joven. Un año antes de la desaparición de Aurora, Edgar se mudó a Tarragona. Cerca de su casa, los vecinos dan una imagen muy definida de él: "Es conflictivo, tiene ataques de ira, siempre está tapado con una gorra... escondido".