De los cuatro socios franquiciados que invirtieron dinero en una empresa de turismo de Ray Cazorla, solo uno denunció, quien ha conseguido recuperar 10.000 euros, la mitad de lo que invirtió. Aday Domínguez, periodista de la televisión canaria, indica que podría haber entre "siete y ochos presuntas víctimas de este señor" y que la deuda del presunto fraude en Canarias "podría alcanzar los 300.000 euros".

"Te cuento una anécdota de una persona a la que le debe 20.000 euros. Lo llama y le dice que está en el hospital con un tumor cerebral. Esa persona fue a verle y vio que tenía una vía puesta y que se había afeitado la cabeza. Pensó que le quedarían dos o tres semanas de vida", señala el periodista, quien apostilla que esto ocurrió "hace unos diez años".