Jesús Espinosa / @_jesusespinosa_

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, se quejó durante la manifestación de Barcelona tras los atentados de las relaciones económicas con dichos países: “Arabia Saudí es un problema y las relaciones económicas de España con países que han contribuido a mantras ideológicos que han alimentado el terrorismo yihadista son un problema”.

También lo hizo el secretario general de la formación morada en Madrid, Ramón Espinar: “No podemos seguir vendiendo armas a Arabia Saudí cuando luego las suministran al ISIS o al Daesh”.

Es más, el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya en el Congreso, Gabriel Rufián, también mostró su desagrado en Telecinco: “Estamos hablando de que España es el tercer país que más vende armas a Arabia Saudí, 110 millones de euros en el año 2016, que de forma directa o indirecta patrocina o financia el Daesh”.

¿España vende armas a Arabia Saudí? ¿Por cuánto dinero?

Efectivamente, España vende material militar a Arabia Saudí. Pero no es el Gobierno español el que lo hace, sino las empresas españolas. Tan solo en el último año, las empresas españolas han exportado material de defensa a Arabia Saudí por valor de 116 millones de euros, según la Secretaría de Estado de Comercio. Es más, España es el séptimo país en la venta mundial de armas entre 2012 y 2016. Este último es un dato del Instituto Internacional de Investigación por la Paz de Estocolmo (SIPRI), entidad independiente que elabora estudios sobre el gasto militar internacional.

Lo que las empresas españolas venden al país arábico es, sobre todo, aviones de reabastecimiento en vuelo, repuestos para aeronaves de transporte, granadas, munición de artillería, munición de calibre medios, equipos de detección e identificación de señales…, tal y como se establece en el balance anual de Comercio.

¿Cuánto ganan las empresas españolas con la venta de armas?

En total, y desde el año 2010, las empresas españolas han exportado armas por valor de 20.000 millones de euros. En el último año 2016, la cifra ascendió a 4.051 millones de euros.

España no solo vende armas a Arabia Saudí; de hecho, su principal cliente son los países de la OTAN, con exportaciones por valor de 2.511,7 millones de euros en el último año.

¿Qué empresas españolas venden material de defensa a Arabia Saudí?

Según el último índice de empresas españolas establecidas en Arabia Saudí, del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX), habría dos empresas españolas radicadas en el país arábico: INDRA y EADS-CASA. Aunque esta último ya no existe, forma parte de Airbus.

La primera, INDRA, opera en el sector de Defensa y Seguridad Militar. Es una sociedad participada en un 20,14% por el Gobierno. Esta empresa aparecería hasta el 2009 en el top 100 de las empresas que más armas venden por año, elaborado SIPRI. Indra habría ganado hasta 2009 más de 1.000 millones de dólares con la venta de material de defensa.

Otra de las empresas españolas que cuenta con Arabia Saudí entre su historial de clientes es la empresa pública Navantia. Ésta es la encargada de fabricar en los astilleros de Cádiz corbetas para Arabia Saudí. Sin embargo, su situación económica es extremadamente complicada. Al borde de la quiebra, la empresa ha perdido, según las estadísticas de SIPRI, más de 400 millones de dólares desde el año 2007.

Actualmente, la empresa intenta ultimar un contrato con Arabia Saudí con el que ganaría 2.000 millones de euros con la construcción de cinco buques llamados ‘Avante 2200’. Sería el mayor contrato de su historia. El presidente de la entidad, José Manuel Revuelta, acompañó, junto a otros empresarios, al Rey Felipe VI a Arabia Saudí para darle un empujón al acuerdo.

En Vigo se encuentra la empresa Rodman Polyship. El astillero ha sido un referente en el diseño y construcción de patrulleros y embarcaciones de vigilancia para organismos policiales y militares para otros países. La empresa ganó en septiembre de 2013 una adjudicación para suministrarle 40 patrulleras al país árabe por un importe total de 7,4 millones de euros.

Por último, hablamos de Nightvision Laser Spain (NVLS), que se dedica al desarrollo, fabricación, distribución y reparación de equipos de visión nocturna y térmico. Tiene una filial en Arabia Saudí.

¿Existen controles a la venta de material militar?

Una empresa no tiene la potestad de vender material militar y de defensa a otros países sin pasar una serie de controles obligatorios. El Gobierno se reserva el derecho a autorizar la exportación e importación de material de defensa mediante la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y de Doble Uso (JIMDDU). Éste es un organismo interministerial, aunque adscrito funcionalmente a Economía, en el que están representados los Ministerios implicados en el control del comercio exterior de material de defensa: Exteriores, Defensa, Economía, Hacienda, Interior e Industria.

La función del JIMDDU es realizar un informe acerca de la idoneidad de la operación, que será enviado a la secretaría de Estado de Comercio. Ésta es, en última instancia, la que autoriza las operaciones de exportación e importación de material de defensa.

- Pero… ¿bajo qué normas opera el JIMDDU?

La luz verde para la exportación e importación de material militar se realiza bajo el paraguas de la [[LINK:EXTERNO|||https://www.boe.es/boe/dias/2007/12/29/pdfs/A53670-53676.pdf|||Ley 53/2007]] y el Real Decreto 679/2014, ambos textos españoles destinados a regular el control del comercio exterior de material de defensa y de doble uso. Su objetivo es fijar los requisitos y procedimientos a la hora de controlar la exportación de material militar.

En la primera Ley se establece que España tiene la obligación de asegurar que sus exportaciones “no fomenten la violación de los derechos humanos, no aviven los conflictos armados ni contribuyan de forma significativa a la pobreza”.

A nivel europeo, existe más de una decena de normativas comunitarias para regular el comercio de material militar y de defensa. Destaca la Posición Común Europea (PESC) de diciembre de 2008, por el que los países europeos se comprometen, entre otras cosas, a conceder exportaciones “únicamente cuando existe conocimiento previo fiable del uso final en el país de destino” y a denegar cualquiera que puedas “cometer violaciones graves del Derecho internacional humanitario”.

Y, por último, a nivel mundial, destaca el Tratado sobre el Comercio de Armas (TCA) de las Naciones Unidas (ONU). España lo firmó en junio de 2013, comprometiéndose a adoptarlo para garantizar los derechos humanos en las transferencias de armas. En su artículo 6.3 se establece: “Un Estado parte no autorizará ninguna transferencia de armas convencionales (…) si tiene conocimiento de podrán utilizarse para cometer genocidio o crímenes de lesa humanidad”.

- ¿Cómo garantiza el Gobierno español que la exportación de armas no irá a parar a grupos armados?

El Gobierno español respondió a esta misma pregunta por escrito al senador del Grupo Mixto, Joan Iñarritu. “Cada solicitud de exportación que ha sido autorizada a Arabia Saudí y a los países de la Liga Árabe ha estado acompañada de garantías de uso final, de no empleo del producto o equipo exportado fuera del territorio del país de destino y de cláusulas de no reexportación”, aseveró el Ejecutivo.

Y, además, añadió: “Las autoridades de este país certificaron que los equipos y las municiones iban a ser destinados a uso interno y en ningún caso iban a ser reexportados sin el visto bueno del Gobierno español”.

Es decir, el Gobierno alega controles, pero admite que la garantía de que éstas sean usadas debidamente se sustenta fundamentalmente en ‘confiar’ en Arabia Saudí, junto con “certificados de último destino”.

Las ONGs piden más controles para la venta de armas

Las Organizaciones No Gubernamentales alertaron sobre los controles para la venta de armas en un informe llamado “El riesgo de la complicidad en la comisión de crímenes de derecho internacionales” realizado conjuntamente por Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y OxFam Intermón.

En concreto, piden denegar las autorizaciones para transferir armas a Arabia Saudí “mientras se siga teniendo información, de fuentes fiables y fidedignas, de que las armas se podrían emplear para cometer o facilitar violaciones graves de los derechos humanos”. “Tampoco se debe autorizar el posible contrato de las corbetas de Navantia”, concreta.

Estas fuentes que citan las ONGs son, entre otras, el Balkan Investigative Reporting Network (BIRN) y el Organized Crime and Corruption Reporting Project (OCCRP), que alertaron en 2016 un suministro de armas por valor de 1.200 millones de euros de países occidentales a Arabia Saudí y Turquía que se desviaron a grupos armados en Siria y Yemen. Es más, la propia Amnistía Internacional denunció un desvío masivo de armas a grupos armados acusados de cometer violaciones de derechos humanos.