En la Comunidad Valenciana más de un centenar de cargos públicos se han vacunado saltándose el protocolo. Como medida "ejemplarizante", el presidente regional, Ximo Puig, ha defendido que no deberían recibir la segunda dosis de la vacuna, esencial para lograr la inmunidad. Algo que choca con lo que Sanidad cree que debería hacerse.

De nuevo, en El Objetivo ha vuelto a defender su planteamiento y a explicar su posición: ¿Tenemos que aplicar la primera dosis a una persona vulnerable que merece la vacunación, y podemos contribuir a que esté inmunizada, o tenemos que dar una segunda dosis a una persona que se ha saltado el protocolo?", se cuestiona Puig, asegurando que es un debate político, ético y también médico. Además cree que cuando les corresponda vacunarse "ya habrá más vacunas y posibilidades de dar respuesta".

Por ello, insiste en su justificación: "No se trata de dársela a una persona, se trata de dársela a una persona que puede salvar la vida". "Si no hay una consideración de carácter médico que influya negativamente en la persona que, aunque sea irregularmente, ha obtenido la vacuna, sigo siendo partidario de que se vacune a quien lo necesita".

Durante la entrevista en El Objetivo ha mantenido también que "nadie del Gobierno" valenciano se ha vacunado y ha informado de que "hay una investigación en marcha y se va a llegar a todas las consecuencias".

Sobre las últimas restricciones que se aplican en la comunidad, Ximo Puig ha lamentado el cierre de la hostelería, porque reconoce que "causa una gran pérdida a muchas familias que ven destrozada su situación económica". Por ello, ha anunciado que ha puesto en marcha "un plan de ayudas".