“Como todos los problemas, tiene que ver un poco con todo. Hay una crisis económica muy grande que está provocando una gran desafección hacia todas las instituciones”, así opina Vallespín sobre el evidente empeoramiento de la imagen de la corona. Afirma que este empeoramiento se debe, entre otras cosas a “los escándalos que han aparecido en su seno”. “Es indudable que el caso Urdangarin ha hecho muchísimo daño al prestigio de la monarquía, al igual que la caza del ey en Botswana”, concluye el exdirector del CIS.

“Creo que hay una doble afectación, hay una afectación de todas las instituciones que vienen de la época de la transición”. Sobre cómo ven los jóvenes a la monarquía también fue preguntado Vallespín, confiesa que “los jóvenes no tienen la experiencia que han tenido los de nuestra generación de la transición y del papel que jugó el rey en un momento muy delicado como fue el golpe de Estado”. “Los jóvenes lo ven como una institución anacrónica, no acaban de encajar la monarquía en un contexto moderno, quizás por la falta de vínculos históricos”, afirma el catedrático.