Nadia Calviño, vicepresidenta de Asuntos Económicos, ha defendido en El Objetivo la gestión que hace el Gobierno de la crisis del coronavirus tanto a nivel sanitario como a nivel de medidas económicas y sociales implementadas para "no dejar a nadie atrás". Y en ese sentido, ha destacado, tienen la sensación de que "no podemos hacer nada más".

Así, ha reconocido que el equipo del Gobierno está compuesto por "humanos, que pueden cometer errores", pero considera que los ciudadanos están percibiendo que se trata de un equipo "absolutamente comprometido, trabajando día y noche desde el primer momento para tratar de dar la mejor respuesta a una situación inédita".

"No tenemos un guión o un plan. Seguimos las recomendaciones de las autoridades sanitarias y hemos intentado compaginar esas decisiones sanitarias con decisiones en el plano económico y social para que nadie se quede atrás", relata la ministra. Medidas que, dice, toman "desde la responsabilidad, con determinación y contundencia" y que son vistas de cara al exterior del país como medidas que "están a la vanguardia a nivel mundial".

Además, Calviño ha querido destacar que esta situación afecta a todos en el plano personal, y que a los miembros del gobierno les afecta "doblemente porque como responsables estamos tratando de dar lo mejor de nosotros mismos para pasar cuanto antes a la etapa de reconstrucción".

"Tenemos la sensación de que no se puede hacer más. Estamos comprometidos con nuestro país y con los españoles, y seguiremos haciéndolo lo mejor posible", ha zanjado la ministra en el programa.

Durante la entrevista, Nadia Calviño ha asegurado que el Gobierno estudia "implementar lo antes posible el ingreso mínimo vital". Una medida que pretende ser "un inicio, un piloto, de lo que se quiere poner en marcha de forma general y con carácter permanente".