Lucía Muñoz tiene 26 años y es diputada de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados. Afirma que nunca pensó que se dedicaría a la política: "De pequeña quería ser muchas cosas, desde astronauta hasta empresaria, nunca me imaginé que sería política".

Además, la diputada, una de las más jóvenes del Congreso, destaca la relevancia que tiene que haya gente de su edad en el hemiciclo: "Es importante que la gente joven pueda tener voz y esté representada en la Cámara".

Algo en lo que coincide Marta Rosique. Esta diputada de 23 años de ERC destaca que lo que más le llamó la atención del Congreso fue lo "antiguo y arcaico" que le pareció todo.

"En el hemiciclo tienes que transmitir un mensaje que representa a mucha más gente, no solo a ti", destaca Rosique, por eso, la joven explica que usa "camisetas con mensaje para llegar a las personas y transmitir más".

Aunque el partido que representan no es el mismo, ambas tienen claro que su posición no las beneficia para estar en política. "El ser mujer y joven te obliga a demostrar el doble lo que vales", destaca Muñoz, mientras que Roque concluye recalcando que este hecho hace que las critiquen mucho más: "Tenemos que luchar contra ello".