Durante su infiltración en su propia empresa, Dado Lima, el jefe de Toro Burger, se encontró con algunas situaciones bastante tensas en las que tuvo que aguantar el tipo para no hacer saltar por los aires todo el plan y el programa. Uno de los momentos en los que más tuvo que morderse la lengua lo protagonizó Dariela, una de las camareras.
Además de no tener ni idea de los ingredientes de las hamburguesas e inventárselos sobre la marcha cuando los clientes le preguntaban, la joven también le echaba imaginación a los precios, inventándose costes extra en presencia de su 'Marco', su aprendiz, sin saber que en realidad era su jefe.
"La hamburguesa que prefieras la puedes hacer con pollo, lo único es que tiene un coste extra de 3 euros", aseguraba con rotundidad y sin pestañear ante la atónita mirada de 'Marco', dando a entender que no era la primera vez que lo hacía. "No sé si reír o llorar", aseguraba el chef ante las cámaras. "¡No hay coste extra! ¡Es todo lo mismo, cambia uno por otro!", exclamaba desesperado.
Por si fuera poco, su empleada también recibía un toque de atención de la encargada por un importante descuido.
Más Noticias
- El Maestro Joao expone qué piedras pueden ayudar a atraer el dinero, el éxito o el bienestar
- Cancela su boda cuando descubre que su novio no sabe la tabla de multiplicar del 2: "En 2x3 ya empezó a atascarse"
- Alfonso Arús, tras ver el espectacular homenaje a Nicole Kidman: "¿Queda bótox todavía en California?"
- Así reacciona Alfonso Arús al ver la camiseta de Sebastián Yatra con la cara de Julio Iglesias junto a Aitana
- Los miembros del robo de arte contemporáneo más grande de España: de anticuarios del rastro a un taxista con antecedentes
(*) Desde laSexta.com estamos recuperando los mejores momentos de la hemeroteca de El Jefe Infiltrado.
Hemeroteca
"Se echa de menos un jefe que motive": el cocinero de Toro Burger se sincera con su 'ayudante' sin saber que es su jefe infiltrado
Fede era el cocinero más desmotivado de Toro Burger, a pesar de ser uno de los mejores. Dado Lima, el jefe, aprovechó su infiltración para intentar averiguar el motivo. Pero hay veces que las verdades duelen.