A pesar de haber llegado su hora de descanso, Samara quiere preguntarle qué le ha parecido el día de trabajo a su 'aprendiz', quien, en realidad, es su jefe infiltrado. Sin embargo, 'Marcos' (como se hace llamar Dado Lima, el CEO de Toro Burger) quiere dejar a un lado los asuntos laborales y conocer algo más a su empleada.
"Estuve un año en Siria. Es una historia un poco complicada", dice la trabajadora. "Cuando tenía 10 años, mi madre se quería divorciar de mi padre porque la golpeaba, no la dejaba salir", narra. Es en este momento en el que dio comienzo el año más duro de su vida. Su padre la secuestró y la alejó de su madre durante casi doce meses. "Todos los días me decía que mi madre llegaba mañana", relata.
"Un día, yo estaba en el cole y una de mis compañeras de clase me dice que un señor me estaba buscando y era mi madre disfrazada de hombre". Su madre la rescató y volvieron a Venezuela. A Samara le gustaría escribir un libro dedicado a su madre y a todas las mujeres que han pasado por lo mismo que ella.
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Dado Lima está impresionado con su dramática historia familiar. "Nunca me lo hubiera imaginado en mi vida", afirma, mientras destaca la entereza y la fuerza de la cocinera.

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"Se echa de menos un jefe que motive": el cocinero de Toro Burger se sincera con su 'ayudante' sin saber que es su jefe infiltrado
Fede era el cocinero más desmotivado de Toro Burger, a pesar de ser uno de los mejores. Dado Lima, el jefe, aprovechó su infiltración para intentar averiguar el motivo. Pero hay veces que las verdades duelen.