El Gran Wyoming afirma que "un gesto simple puede desencadenar catástrofes" como, por ejemplo, meter un voto en una urna. El presentador de El Intermedio expone que el pasado 23 de julio, el PP ganó las elecciones, pero no cuenta con los apoyos suficientes para formar gobierno. A partir de ahí, llegó el turno de Sánchez, que inició negociaciones con los independentistas y se abrió a aprobar una ley de amnistía.

Finalmente, indica que se ha desencadenado una oleada de protestas en las que están participando "ciudadanos de diverso pelaje, incluidos amantes de las banderas y también de las aves", comenta. Pero no puede evitar preguntarse qué hubiera pasado si los resultados del 23J no hubieran sido esos y si la ventaja mínima del Partido Popular hubiera sido algo mayor.

Este señala que Feijóo hubiera podido formar gobierno, Puigdemont seguiría pasando los días en Bruselas, Pedro Sánchez estaría preparando "su puerta giratoria como modelo de Versace", dice, y Abascal, probablemente, sería vicepresidente del Gobierno y eso, destaca, sería "bastante preocupante".

"¿De verdad puede ser vicepresidente alguien que no duda en agitar la calle y que no reconoce los resultados de las urnas? Alguien que ha hecho llamamientos para que las fuerzas del orden se rebelen contra un Gobierno legal y legítimo", subraya. Por eso, sostiene que "un político que mantiene ese comportamiento debería estar alejado de cualquier tipo de responsabilidad pública".