En 2016 el juez Salvador Alba citaba en su despacho al empresario Miguel Ángel Rodríguez que, por entonces era presidente de la Unión Deportiva Las Palmas y estaba siendo investigado por fraude a Hacienda. Sin embargo, el interés que tenía en él era sonsacarle información de la jueza Victoria Rosell para perjudicarla de cara a las elecciones. Pero, ¿por qué le escogió a él? Porque tenía relaciones comerciales con el marido de ella.

De esta conspiración tenemos constancia gracias a que el presidente de Las Palmas "no terminaba de fiarse" y lo grabó todo. A partir de ese momento se desencadenó una batalla, en la que tuvo un papel importante el exministro de Rajoy Jose Manuel Soria, para acabar con las aspiraciones políticas de Victoria de Rosell. Finalmente, Rosell demostró su inocencia y el juez Alba fue condenado a seis años y medio de cárcel, dieciocho meses de inhabilitación y a pagar una indemnización de 60.000€ a Victoria. Puedes ver la historia al completo en el vídeo principal de la noticia.