Jordi Morera se dedica a una de las profesiones que más adeptos ha ganado durante esta cuarentena, en la que la gente se ha echado a sus cocinas a preparar todo tipo de platos, postres e incluso panes.

"El aburrimiento es tal, que cualquier cosa que veas que puedes crear con tus manos, la haces", reconoce el panadero. Si bien cuenta que al principio la gente "menosprecia un poco el pan", quién lo hace una vez "se acaba enganchando".

Él trabaja en un horno heredado de su familia que se animó a reconstruir hace ocho años. "Lo precioso de encender por la noche este fuego, recompensa el haberte levantado a la una de la madrugada". "Está a 250 grados, no sé si me estáis viendo ,pero estoy sudando mucho", dice, a lo que Thais Villas contesta: "No pasa nada, es muy cinematrográfico".

Desde su panadería enumera sus consejos para hacer un buen pan. Se necesitan un kilo de harina, 700 gramos de agua, 20 gramos de sal y 100 gramos de masa madre o medio garbanzo de levadura.

Una vez se tienen todos los ingredientes, "se amasa, que es una cosa muy chula". "La nevera hace el resto del trabajo, se deja fermentando toda la noche. Después, cuando te levantas, le das la forma que quiera y que fermente durante otras tres o cuatro horas más con un paño encima", indica.

Por último, se pone al horno a la máxima temperatura y se va bajando hasta que se vea crujiente.

Otros momentos destacados

En pleno confinamiento, son muchos los que necesitan ahogar su estrés en el deporte. Carmen Falante es una de las personas que, a través de las redes sociales, anima el aislamiento de los españoles en tiempos de coronavirus. Incluso Thais Villas se anima a practicarlo en este vídeo de El Intermedio.

Thais Villas también charló con Carmen González y Mauro Picatoste, una pareja gallega que versionan canciones de artistas como Sabina o Dorian para adaptar las letras a tiempos de cuarentena.

"Me quiero largar de este piso, a cualquier otra parte", reza una de sus versiones.