La enmienda socialista que pretende excluir a los animales de caza de la ley de protección animal se ha encontrado no solo con la oposición de Unidas Podemos sino también con un gran rechazo social. Durante el fin de semana 160 asociaciones animalistas se han manifestado en las principales calles de nuestro país para pedir al Gobierno que proteja a los perros de caza de la misma forma que protegen a los domésticos.

Estos colectivos denuncian que, precisamente, animales como los galgos están expuestos a una mayor vulnerabilidad. El fin de la temporada de caza es el segundo motivo de abandono de perros en España. Para conocer más detalles sobre ellos, Andrea Ropero se ha desplazado hasta la asociación 'Somos galgos' en Madrid para hablar con Silvia Carballo, cofundadora de la asociación. Y es que casi 50.000 galgos son abandonados cada año en España.

"El galgo es el perro más vulnerable porque les usan como herramientas de trabajo", explica Carballo, que denuncia que "si el perro no vale lo desechan". Además, critica que "es una raza que, al no estar controlada, se cría a mansalva y se producen abandonos": "Nadie hace nada por evitarlo, está permitido todo".

Tras muchos años luchando y recuperando perros de raza, en esta asociación han conocido impactantes historias de galgos como la de Moro o la de Vida. Silvia Carballo cuenta cómo su dueño le tenía entablillado con cinta americana tras romperse una pata corriendo o Vida, a la que encontraron con el cuello rajado para quitarle el chip. "Si alguien se quiere deshacer del perro y no dejar rastro, lo único que le queda es quitarle el chip con sangre fría, con una navaja o un cuchillo le cortan el cuello y se lo quitan", denuncia Carballo, que insiste en que "el que quiere matar o maltratar un perro en España lo puede hacer porque es difícil que te pillen pero si te pillan sabes que no te va a pasar nada". Puedes ver su entrevista completa en el vídeo principal de esta noticia.