La pandemia de coronavirus ha desatado la solidaridad en el mundo, pero también ha descubierto el egoísmo de otras muchas personas.

Para descubrir el grado de indignación que crean este tipo de actos insolidarios, El Gran Wyoming ha creado 'El Indignómetro'.

Uno de los casos que más indignación ha creado es el de Miriam Armedo, una empleada de un supermercado que se encontró con una nota al llegar de trabajar que le solicitaba 'dejar el edificio' "por el bien de todos".

En el caso de Clara Serrano, una enfermera, no fueron sus vecinos, sino su casero quien la solicitó que se marchara. El episodio terminó con una patrulla de Policía explicándole al casero que no podía hacer eso.

"Tengo el Indignómetro que da miedo, me entran ganas de pegar gritos o salir al balcón", ha espetado Wyoming después de que el 'Indginómetro' llegara a números rojos.

Pero, sin duda, no de los casos más duros es el que sufrió una ginnecóloga que se encontró con un graffiti en su coche que decía "rata contagiosa".

"Esto no solo es un ataque contra los profesionales de la sanidad, sino a toda la sociedad que dependemos más que nunca de ellos", ha reprendido Wyoming. "Viendo las actitudes miserables que el coronavirus genera en algunas personas propongo el hashtag 'quédatecallado'", ha apuntado.

Otros momentos destacados

Wyoming también ha querido 'disculparse' con los ancianos en nombre de la sociedad. "¿Por qué no se ha puesto todo el empeño en salvarles?", cuestiona el presentador.

Además, tras la rectificación del Gobierno en las medidas de confinamiento de los niños, El Gran Wyoming analizó la gestión del Ejecutivo en esta crisis del coronavirus: "En un mismo día se están dando pasos hacia delante y hacia atrás".