Es normal que los ciudadanos tengan dudas sobre el uso de las mascarillas, ya que el propio Gobierno ha cambiado de opinión sobre la necesidad de su uso en múltiples ocasiones.

A principio de la crisis, a finales de febrero, las mascarillas eran "como riñoneras", como ha explicado El Gran Wyoming.

Unos días después, el 29 de febrero, Illa afirmaba que la mayoría de los ciudadanos no necesitaban mascarillas, sino que solo eran necesarias para las personas que eran portadores del virus o en sanitarios.

Sin embargo, la crisis se iba agudizando y las mascarillas ya eran "recomendables" el 13 de abril. De hecho, se comenzaba a invertir en la producción nacional.

A finales de abril el Gobierno decía que las mascarillas eran "muy deseables", pero no obligatorias. Cada uno podía decidir si quería o no portarlas, pero la cosa duró poco porque a partir del 4 de mayo su uso ya era obligatorio en el transporte público.

"Y así hemos llegado hasta hoy, día en el que el Gobierno baraja hacer obligatoria la mascarilla en cualquier espacio público. En tres meses la mascarilla ha pasado de no ser necesaria a que posiblemente tenga que ser obligatoria", ha espetado Wyoming, que ha asegurado que "la gestión del uso de mascarillas por parte del Gobierno es un ejemplo perfecto de cómo se ha gestionado la pandemia en general: se ha echado en falta algo de claridad".

Otros momentos destacados

Además, Dani Mateo repasa en El Intermedio los motivos que han llevado a la consejera de Sanidad de Aragón y al gerente del hospital Virgen Macarena a dimitir: de recomendar no usar mascarillas a animar a los médicos a fabricar sus EPIs.

Además, El Gran Wyoming ha recordado la importancia de no repetir los errores de 2008 durante la crisis económica que se avecina por el coronavirus: "Por mucho que estemos en una crisis mundial, se demuestra una vez más que la economía española, basada sobre todo en el turismo y los servicios, está sufriendo mucho. Es lo malo de haber abandonado el i+D".