Dani Mateo ha hecho un repaso a las dimisiones más rápidas de la historia, como ha ocurrido en Suecia cuando la primera ministra no ha podido sacar las cuentas públicas de su Gobierno y ha decidido dimitir solo ocho horas después de haber ocupado el cargo. Quizás ese sea ahora el récord mundial de la dimisión, pero en España también tenemos importantes "plusmarquistas" en esta disciplina.

Por ejemplo, Màxim Huerta, que solo estuvo siete días en el cargo de ministro de Cultura. Antes de esa dimisión exprés, la mejor marca en esa disciplina la tenía el entrenador de fútbol José Antonio Camacho, que aunque hizo la pretemporada en el Real Madrid dejó su cargo después de un mes de trabajo efectivo con su equipo. Esto, sin embargo, no es una cuestión nueva sino que se trata de una bonita tradición española. No te pierdas las otras dimisiones rápidas de nuestra historia que Dani Mateo repasa en este vídeo.