La postura del PP contra la eutanasia puede ser "postureo", así lo cree Dani Mateo, que aporta datos: a la formación liderada por Casado le cuesta "mantenerse firme en sus ideales".
El de la eutanasia es sólo el ultimo caso, anteriormente se han manifestado contra diversas medidas sociales que han acabado aceptando e incluso utilizando en sus vidas privadas, por eso El Intermedio ha presentado una nueva sección de la hemeroteca: 'Qué pensaban entonces'.
'Qué pensaban entonces' es un programa de nostalgia política que repasa los argumentos de la derecha contra ciertos derechos a los que todos nos hemos adaptado.
Arrancamos en el año 1981: Antonio Tejero ponía contra las cuerdas a la democracia con el 23-F, y también el Gobierno de UCD propuso equipararnos a Europa aprobando una ley del Divorcio. Por aquel entonces Alianza Popular, la precuela del PP, se mostraba radicalmente en contra de la propuesta. "Para mí el principio es que la familia es indivisible", espetaba entonces Álvarez Cascos, que años después acabaría separándose de tres mujeres.
Del divorcio pasamos al aborto: en 1985, el Gobierno de Felipe González propuso una ley de plazos para la interrupción del embarazo. Una vez más, la derecha se mostraba radicalmente en contra. Ruíz Gallardón, el padre del que luego fuera ministro, defendía en el Congreso que el proyecto socialista carecía de defensa para el feto.
Tampoco les gustó la propuesta de 2010 de Rodríguez Zapatero. La derecha entonces protestó por el aborto, y a la cabeza de las manifestaciones se encontraba Esperanza Aguirre, que alertaba sobre los "peligros" de la ley del aborto, categorizándolos de "asesinatos".
Otro derecho social que a la derecha no hizo gracia fue el matrimonio homosexual. En 2005, Rodríguez Zapatero aprueba una ley que lo permite, lo que molestó a figuras como Mariano Rajoy, que categorizaba el matrimonio como "una institución entre un hombre y una mujer para la procreación". Sin embargo, el ahora expresidente, acabó acudiendo pocos años después a la unión de su amigo Maroto con su marido.
Ana Botella fue otra de las voces contra el matrimonio homosexual, al que categorizaba como "tratar de la misma manera a lo que es diferente": "Su se suman dos manzanas dan manzanas, si se suman manzana y pera jamás podrían dar manzana porque son componentes distintos".