Texas se ha convertido en un lugar de recepción continua de migrantes que consiguen cruzar desde México hasta Estados Unidos. Allí, decenas de personas tratan de cruzar ranchos y alcanzar un lugar seguro, pero no siempre lo consiguen. Además, suelen toparse con el racismo.

Para alcanzar ciudades norteamericanas tienen que atravesar un desierto de polvo y arena junto al 'Río Bravo', con el objetivo de llegar a caminos que les lleven hasta la civilización, donde seguramente tengan como destino la cárcel o la deportación inmediata. En el vídeo principal de esta noticia, Guillermo Fesser muestra el arduo camino que hacen miles de migrantes cada día, la mayoría procedentes de Guatemala, El Salvador y Honduras.

El periodista ha explicado que esta crisis migratoria no es nueva y el viento le devuelve en la cara a Estados Unidos su escupitajo. Y es que los migrantes vienen huyendo de países en los que Estados Unidos intervino en el pasado acabando con sus democracias. Lo explica en este vídeo: