En Argelès, al sur de Francia, se instaló el campo de concentración en el que más de 100.000 republicanos permanecieron hasta que fueron trasladados a otros lugares o algunos regresaron a España. Ahora sus familiares vienen a conocer por primera vez este lugar.
Gonzo habla con Aurelia Quinto, hija de uno de esos exiliados republicanos. "Siento mucha pena, una pena terrible al pensar en el frío, el hambre y la miseria que pasaron", relata. Su padre se llamaba Aurelio y era ferroviario. También era miembro de la CNT y daba conferencias en las fábricas de mujeres para organizar el sindicato de mujeres libres.
Aurelia muestra un poemario realizado por su padre durante el tiempo que estuvo en el campo de Argelès. "Nunca me había atrevido a bajar hasta esta playa. Sabía que me iba a desmontar", confiesa Aurelia en El Intermedio, que celebra el homenaje realizado en Francia a estos exiliados.
"Nunca se hubiera creído mi padre este homenaje", apunta Aurelia, que denuncia la falta de reconocimiento de España a quienes trabajaron por sacar al país de la incultura y la miseria.
Entre los españoles que cruzaron la frontera para escapar del franquismo estaba una niña de diez años, Luisa Miralles. Hoy tiene 91 y recibe a Gonzo en su casa para hablarnos de los días difíciles que vivió en el exilio.
No es el único testimonio. Gonzo se ha trasladado hasta Perpignan, allí huyeron medio millón de españoles en el movimiento conocido como 'La Retirada'. Todos ellos esperaban encontrar un lugar en el que estar a salvo del régimen franquista. Sin embargo el Gobierno del país les encarceló en campos de internamiento.
Accesibilidad
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