Frances Haugen, abandonó su puesto de trabajo en la compañía de Mark Zuckerberg y filtró al 'The Wall Street Journal' documentos que demostraban que la empresa no hacía nada por controlar la información tóxica que circulaba por la red. Toso esto lo recoge en el libro 'La verdad sobre Facebook'.

Esta hace hincapié en el efecto que las redes sociales pueden tener en distintos ámbitos en el mundo y explica que sus antiguos compañeros eran gente inteligente y concienzuda y, sin embargo, "el resultado de su trabajo tuvo graves consecuencias". La ingeniera de datos apunta que "Facebook quería hacerles creer que eran neutrales, que podían utilizar números para decidir lo que era bueno y lo que era malo, cuando en realidad no se puede describir un sistema con números": "La gente que trabaja en Facebook solo ve la cara amable de Facebook y no el sufrimiento que pueden generar".

La ingeniera de datos asegura que lo más importante para luchar contra la desinformación es revisar y eliminar contenido y advierte que "una de las cosas que nos deberían preocupar es que ni Facebook, ni Twitter, ni TikTok informan sobre cuántas personas hacen ese trabajo. Estas compañías no invierten lo suficiente en personal que vigile esto" y afirma que "la IA no distingue lo que es verdadero de lo que es falso".