Los Jiménez Rubio son una familia de alpinistas que ha llegado a lo más alto, han subido dos cumbres de más de 6.000 metros y lo han hecho con sus dos hijos de 9 y 11 años. Vega y Saúl son los alpinistas de menor edad que consiguen esta hazaña.

José María, el padre, reconoce que ha habido ocasiones, durante un ascenso, en las que han llegado a un punto que es "más serio de lo que parece", pero asegura que los niños "han sido bastante fuertes para superarlo y no hemos tenido unas circunstancias en las que hemos dicho no estamos preparados y estamos poniendo en riesgo su vida".

Sobre la dificultad de alcanzar una cima, Vera destaca que "cuando vas en altura, te falta el aire y con las nieves, había unas rampas... pero luego bajar molaba muchísimo". Además, recuerda uno de los momentos que tiene grabado, la bajada del Kang Yatse: "Cuando bajamos, nos aplaudieron todos los grupos y eso fue muy bonito".

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