El artista urbano, Diego As, confesaba a Thais Villas estar impresionado por haber ganado el premio al mejor mural del mundo porque sus inicios fueron "muy de a pie", de ganarse la vida con pequeños encargos, hasta que un día propuso hacer el 'Julio César' y "salió todo redondo": "Fue un antes y un después".

Su mural tuvo tanto éxito que Correos lo escogió para hacer un sello, aunque señalaba que antes había pintado fruterías y hasta una iglesia. El gallego recordaba sus inicios en el mundo del grafiti y contaba que siempre fue mal estudiante pero con 12 o 13 años conoció el espray.

Algo que, al principio, para sus padres fue complicado porque "te ven un chaval sin rumbo en la vida", declaraba. "Yo sabía que no iba a acabar mal por la vida porque siempre fui muy currante, pero al verte salir por las noches con una mochila, se temían lo peor".

(*) Desde laSexta.com estamos recuperando los mejores momentos de la hemeroteca de El Intermedio.