Han pasado seis meses desde que se aprobó el Ingreso Mínimo Vital, una prestación de gran calado social que, sin embargo, por el momento solo ha llegado a unas 160.000 familias de las 850.000 pronosticadas por el Gobierno.

Andrea Ropero ha preguntado sobre esta prestación a José Luis Escrivá, que ha cifrado en 1,1 millones de solicitudes las recibidas en estos meses. De estas, ha indicado en El Intermedio, aproximadamente la mitad se deniegan. "Nos tiene que hacer pensar", ha reconocido el ministro.

"Es posible que se crearon expectativas excesivas sobre el ritmo al cual nosotros íbamos a ser capaces de llegar", ha admitido asimismo el titular de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que ha señalado que "en unos meses es simplemente imposible llegar a todo el mundo".

Preguntado sobre si responsabiliza a Pablo Iglesias de haber creado esas expectativas irreales, Escrivá ha evitado "singularizar" y, pese a las críticas del vicepresidente segundo -que aseguró que es "inaceptable" que el IMV no esté llegando- ha mantenido que la confrontación "tiene una dimensión más mediática que sustantiva en el día a día de la función de gobierno".

Las lágrimas de una madre cuando el IMV no llega

Andrea Ropero también ha entrevistado a dos mujeres que siguen a la espera de recibir esta ayuda. Una de ellas no ha podido evitar emocionarse al recordar cómo una desconocida le envió 50 euros por Facebook: "Me ayudó a pagar la luz sin conocerme".