La detención del Duque de Feria por la Policía Nacional impactó a España en 1993. Después de su divorcio de Naty Abascal, Rafael Medina se vio envuelto en diversos escándalos de drogas y prostitución, pero ese año se le acusó de algo mucho más grave, el secuestro de una niña de cinco años.

"A mi niña, este señor le quitó la ropa y la fotografió", afirmó en su momento la madre de la pequeña, Flora Trabajo. Por su parte, el abogado del Duque de Feria, Francisco Baena Bocanegra, indicó que existían "muchas fotografías" en las que se veían, que "evidentemente" era "él", pero "en otras no se le reconoce".

Finalmente, se determinó que el Duque de Feria con ayuda entre otras de la tía de la menor, había secuestrado, desnudado y fotografiado a la niña. Aunque la Justicia le condenó a 18 años de prisión por corrupción de menores, poco después el Tribunal Supremo redujo la pena a la mitad. Tras todo ello, el Rafael Medina solo cumplió cinco años de condena.