Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre, tras un acto de campaña en Móstoles, se disponían a despegar en un helicóptero desde la plaza de toros para hacer una visita aérea del municipio madrileño, pero la jornada no terminó como esperaban.

A los pocos minutos de despegar el aparató se desplomó, la aeronave cayó desde ocho metros de altura y quedó prácticamente destruida. Pese al aparatoso accidente todo quedo en un susto, Mariano Rajoy fue el único herido con una luxación y una rotura en dos dedos. Al día siguiente el presidente del PP recibía el alta en el hospital de Móstoles.

La investigación posterior concluyó que los seis ocupantes eran demasiados, entre ellos se encontraba un cámara de Antena 3 que grabó todo lo ocurrido.