laSexta estrena el martes una nueva edición de Constructor a la fuga que recibe esta semana la llamada de auxilio de una pareja cuya casa de sus sueños lleva más de 4 años en ruinas por un constructor que al parecer abandonó la obra dejándola completamente inhabitable. Enormes charcos interiores causados por goteras, puertas y estructuras de madera infectadas de termitas, vigas de carga prácticamente deshechas, cables aparentemente instalados pero sin instalar… Así está la casa de Marta y Julián, que además cuenta con un enemigo invencible: el tiempo, que corre en su contra y está provocando que la casa se vaya deshaciendo poco a poco. Un duro caso que se complica con las dificultades para dar con el paradero del constructor, un contratista argentino que se teme que haya podido regresar a su país.

Marta y Julián llevan juntos desde hace 14 años y hace un tiempo decidieron tener su primera casa y sumergirse en el proyecto de formar una familia. En Estivella, un pueblo cercano a Valencia rodeado de naturaleza y tranquilidad, encontraron una casa de la que se enamoraron al primer instante. Pero, como la mayor parte de las edificaciones del lugar, grandes y viejas, requería una reforma costosa y de envergadura. Contrataron a un constructor que les recomendó el banco y tras haber pagado más de 50.000€ el constructor abandonó la obra habiendo realizado sólo una pequeña parte del trabajo. La casa quedó inhabitable y con el paso del tiempo va deshaciéndose poco a poco: las termitas están terminando con puertas de madera y vigas de importancia, las goteras provocan enormes charcos en el interior de la casa y lo que tenía que haberse convertido en un hogar es hoy una completa ruina.

En una primera inspección visual Antonio descubre que incluso los cables supuestamente instalados sólo estaban colocados para que pareciera que se había hecho el trabajo. Pero no era así. En definitiva, un proyecto truncado que además lleva un tiempo afectando a la relación de pareja, que hoy tiene serias dificultades para vivir de alquiler y se está planteando tener que regresar a casa de sus padres para poder hacer frente a la situación.

El equipo de Constructor a la fuga pone en marcha una investigación para dar con el paradero del constructor, un contratista del que no saben nada desde hace años, que ha dejado otras víctimas con obras inacabadas o pagos por liquidar y al que no es fácil seguir la pista. Un constructor que, se teme, ha podido regresar a Argentina, su país de origen. Necesitan dar con él para mostrarle la situación en la que ha dejado a Marta y Julián y reclamarle que termine la obra que nunca acabó pero que está terminando con los sueños de una pareja que había puesto todos sus esfuerzos en la que sería la casa de su vida.