En el patio del segundo colegio en el que estudió Fernando Tejero cuando era un adolescente, Albert Espinosa y él se toman un descanso del intenso viaje (físico y emocional) que está resultando a ser esta entrega de 'El camino a casa'. Para reponer fuerzas, disfrutan de una rica merienda, la misma que cuando eran pequeños, rodeados de sonidos de niños.
"Los niños son los más sinceros. Para bien y para mal no tienen filtro", afirma el actor justo antes de sentarse, momento que Espinosa aprovecha para "descalzarse" y quitarse la pierna ortopédica durante un ratito. Ahora sí, llega el momento de comer. 'Fer' saca de la bolsa una telera, aceite, Cola Cao y azúcar.
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"Se cogía un canto, se le quitaba la miga, azúcar, aceite y Cola Cao", va describiendo su receta particular. "Y ya está, y esto era una merienda maravillosa. Esto podría ser un éxito... para subir el colesterol. Esto era un misil. Te lo tenías que tomar con un Cola Cao porque, como podrás comprobar, se te hace una piedra en la boca", bromea.
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