"A mí me agota la pierna de vez en cuando", asegura Albert Espinosa tras sentarse en el suelo a descansar y quitarse la pierna ortopédica. A su lado, Jesús Janeiro también reposa y le pregunta con curiosidad. "¿Pesa mucho?". El escritor le invita a cogerla. "Pesa unos 8 kilos y dura 5 años, porque a los 5 años ya no pueden saber si aguanta el peso o si se rompe", le explica.
"Vale 43.000 euros", asegura ante Jesulín de Ubrique, que se queda impresionado con el precio. Humberto Janeiro, padre del torero, también sufría una lesión en la pierna. "Cuando era muy jovencito se cayó en la sierra esta de aquí atrás y se quedó cojo", cuenta Jesuli. "Imagínate hace 70 años, estar escayolado hasta el pecho durante dos años".
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El escritor rememora la frase que sus amigos del hospital y él decían cuando eran pequeños: "No somos cojos, somos cojonudos". "Tu padre también era cojonudo", le dice a Jesulín.
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Máximo Huerta, de la violencia machista de su padre: "Mi madre preguntaba cuándo se moriría para ser libre"
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