Una mujer animó a su hija pequeña a que posara junto a un águila y su domador para tomar varias fotografías, pero esto se acabó convirtiendo en una pesadilla para la pequeña.

Y es que cuando el animal posó sus garras sobre la cabeza de la niña, esta comenzó a llorar aterrorizada e intentó huir.

Al ver la situación, todos los presentes, incluida la madre, se echaron a reír sin prestar ningún tipo de ayuda a la pequeña.

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