El buque gallego Ángeles Alvariño continúa las labores de búsqueda de Tomás Gimeno y su hija pequeña, Anna, en Tenerife. Este jueves los investigadores dieron con el cuerpo sin vida de Olivia en el fondo del mar junto a una bolsa.

Este barco trabaja con grandes dificultades debido a la dificultad de la geografía del archipiélago. Como ha explicado la periodista Pepa Romero en Aruser@s, esta isla "no tiene plataforma continental y hay caídas muy abruptas desde la costa hasta el fondo del mar, hasta de 1.000 metros de profundidad".

Además, hay muchos desniveles que pueden saltar de los 300 a los 700 metros y "es una zona muy acotada con muchos recovecos y cuevas", lo que dificulta las labores de búsqueda.

Ya han encontrado el cuerpo de una de las niñas

A la espera de una identificación científica, las características físicas del cuerpo encontrado en la tardede ayer por el sónar en el fondo del océano Atlántico indican que se trata de la mayor de las pequeñas, desaparecida junto a su hermana Anna, de un año, hace ya 45 días.

El cuerpo fue hallado por el robot del buque de búsqueda a mediodía a unos 1.000 metros de profundidad y a unas tres millas de la costa tinerfeña. Se encontraba en el interior de una bolsa de deportes amarrada a un ancla. Junto a ella se encontraba otra bolsa de deportes vacía.

El cuerpo fue trasladado a tierra sobre las 18:00 horas y llevado al Instituto Anatómico Forense para el levantamiento, mientras el buque continúa su rastreo en la zona.