"Cuidan de ellos, los miman, los abrazan... pero, en alguna ocasión, son ladrones". Este es el caso de este travieso perro que le ha robado el chupete al bebé y lo tiene él mismo en la boca. Unas imágenes que impactan a nuestros aruser@s, que están más acostumbrados a ver a los canes comportarse como canguros que como monos de Gibraltar.

La pobre niña, sentada en el suelo, mira con cara de pena a su alrededor, pero ni siquiera intenta recuperar su preciado tesoro, quizá porque quien se lo ha quitado es su mejor amigo. Para Angie Cárdenas, se trata más de compartir "desde chiquitines" que de robar. "Ha visto que tiene él el chupete pero piensa, 'venga, va, se lo voy a dejar un rato'. Es una manera de tener un hermano", cree la colaboradora.

Alfonso Arús no acaba de entender por qué este bebé no se ha puesto de los nervios ante este hecho, como el resto de los niños del mundo (quizá habla por experiencia propia, después de lo vivido con sus cuatro hijos). "Si lo roba el perro, parece que el mal es menor". Alba Sánchez cree que a lo mejor puede ser una buena manera para que los pequeños abandonen el chupete. "Ahora, un ratito para el perro".