Como si fuera el león de la Metro Goldwyn Mayer. Así ruge este eructo que ha superado el récord al más largo del mundo. Desconocemos cuál es la dieta de este señor, pero lo que sí podemos asegurar es que es completamente útil para conseguir su objetivo de batir las marcas que fueron establecidas hace más de una década, y además le ha valido para ganarse el pase de Arusoros.

Este tremendo "regüeldo" ha impresionado, y mucho, a los colaboradores de Aruser@s, que esta vez no se han animado a intentar emular lo que han podido ver en la pantalla. "Esto es un movimiento sísmico", comenta algo asqueada Angie Cárdenas. Y no es para menos: "Se mide por largo y por decibelios y alcanza los 110", apunta Alfonso Arús.

El vídeo del sonoro eructo fue grabado además, tal y como apunta María Moya, en un sitio con muy mala acústica: una biblioteca, que esperamos que estuviera vacía.