Las reacciones de los niños son impredecibles y si no que se lo digan a esta madre. La mujer estaba intentando cortar un pez para comer cuando su hijo empieza a gritar y llorar desconsoladamente.
En las imágenes se ve a la madre con un cuchillo en la mano para limpiar el pescado cuando el pequeño empieza a gritar histérico y a cogerle del brazo para impedir que 'sacrifique' al animal'.
La experta Arantxa Coca explica en Aruser@s que a los niños especialmente sensibles, tareas tan cotidianas como limpiar pescado o cortar un pollo puede afectarles. "Lo sufren bastante", asegura. Para evitar reacciones como estas, la colaboradora aconseja dar la comida ya "preparada".
