"Sí es cierto que brilló, pero perdió poder de convocatoria", analiza Tatiana Arús tras conocerse el número de asistentes al último concierto de Isabel Pantoja en el Estadio Olímpico de La Cartuja de Sevilla. A pesar de que el recinto tiene capacidad para 60.000 personas, solo acudieron entre 3.000 y 6.000.

En su anterior concierto en la capital andaluza, reunió a 12.000 personas. "Incluso decían que había entradas que se habían regalado porque había gente que no tenía poder adquisitivo suficiente para acudir al concierto", comenta Angie Cárdenas. Pero esta situación no solo se ha dado en Sevilla. "En uno de sus últimos conciertos en el Palau Sant Jordi se tuvieron que habilitar unas lonas negras para que se viese el graderío más lleno".

Alfonso Arús reflexiona tras conocer esta noticia y llega a una conclusión y hace una petición a sus colaboradores: "Avisadme cuando veáis que se me va un poco la castaña y diga que voy a llenar grandes estadios y mi audiencia será tal... me avisáis (...) Es mejor un entorno un poco más reducido (...) ¡Qué manía con citar a la gente en sitios con tantísimo aforo!", sigue dándole vueltas. "En general, en muchos ámbitos, hay como delirios de grandeza".