"Que él reconozca que se tira pedos antes de confesar a la gente me parece muy 'heavy'. Vete al baño y luego ya entras en el confesionario", comenta entre indignada y divertida María Moya tras ver este vídeo del padre Adam en el que cuenta, con su habitual sentido del humor, la historia de aquel día que comió frijoles negros y una señora entró a confesarse cuando el cura se encontraba un poco indispuesto.
"Los frijoles tienen mucha vitamina P2", explica el sacerdote, que confiesa que "estaba como una armada" para posteriormente imitar el sonido de un pedo. Justo después, entró en su confesionario "una señora pánfila" que le avisó que ahí dentro, algo olía mal.
Más Noticias
- Se conocieron en la UCI cuando eran bebés y ahora tienen un hijo: la historia de película de este matrimonio
- Victoria Beckham considera a la reina Letizia su "musa definitiva": "Nunca se equivoca en términos de moda"
- Roberto Leal, a Raúl Gómez: "¿Todo esto es para que no hablemos de tu chaleco?"
- Sor Lucía carga contra los árbitros del Madrid-Barça: "Quieren ser sordos, ciegos y mudos y en realidad, son tontos"
- El 'dardo' de Pilar Vidal a Gerard Piqué sobre los periodistas en el aeropuerto: "Si los quieres evitar pagas el servicio Premium"
La respuesta del padre Adam demuestra, una vez más, la gracia que caracteriza a este singular sacerdote. "Son tus pecados. Apesta a pecados", dice mientras se ríe con cierta malicia. Una gran anécdota que puedes escuchar entera en este vídeo de Aruser@s.