Es uno de los temas más comentados en las últimas horas y no es para menos. Y es que, este descubrimiento ha sorprendido hasta a los historiadores: el Santo Cristo de Lepanto de la Catedral de Barcelona, conocido como el 'Cristo Negro', en realidad no es negro, algo que se ha desvelado gracias a unas labores de restauración que le han devuelto su color original.

"Se trataba de humo, suciedad y capas de barniz que hacían que no se pudiese vislumbrar el verdadero color de la escultura", explica Hans Arús en Aruser@s. "Es decir, el Cristo de Lepanto originalmente era blanco y por el humo, la porquería y la polución acabó siendo negro", intenta asimilar Alfonso Arús. "Es que parece la base de una sartén", comenta sorprendida Angie Cárdenas.

"A mí ahora, La Moreneta me hace también dudar", asegura el presentador de Aruser@s. Hans Arús no descarta la posibilidad de que los restauradores hayan usado un truco de la sección 'Consejito, consejito' para limpiar la figura.