Este bebé está tan unido a su perro que para él es mucho más que su mascota. También es su mejor amigo y el peluche ideal para dormir a pierna suelta la siesta, aunque el can ronque como un hipopótamo. "Es más que adorable la imagen", asegura Alfonso Arús.

"Pero el ronquido le debe dar tranquilidad al bebé, porque debe notar sus pulsaciones", observa Tatiana Arús. "Tiene una respiración profunda, sí", comenta Angie Cárdenas.

El presentador de Aruser@s cree que, como cualquier ser humano, el can negaría que ronca si tuviera la capacidad de hablar. "El perro cuando se despierta dice, 'yo no ronco, yo respiro fuerte'", imagina Alfonso Arús que diría el animal.