"Los que más han pagado por esto son personas con discapacidad que tienen en el deporte un vehículo que posiblemente conduce gran parte de la autoestima de su vida. Tienen un objetivo que puede ser la hostia, que es participar en los Juegos Olímpicos, que es lo más grande para un deportista, y que nunca lo van a poder conseguir porque unos señores decidieron hacer trampas", reflexiona Quique Peinado, periodista deportivo y redactor de 'Gigantes del Basket' acerca del caso más vergonzoso del deporte español. "Esta historia encierra mucho drama", lamenta.

Tras la estafa de los Juegos Olímpicos en Sydney,Juan Pareja, uno de los dos únicos jugadores con discapacidad que compitieron en los Paralímpicos, no ha vuelto a jugar al baloncesto. "Se me quitaron las ganas de demostrar. Te quitan algo tan preciado, por lo que habías luchado tanto, la ilusión que habías puesto. Que hagan esto no tiene perdón. No tiene sentido. ¿Cómo puede hacer estas cosas esta gente?, se pregunta.

Desde entonces, el baloncesto para las personas con discapacidad quedó fuera de la competición para siempre, con lo que no solo se vieron afectados Ramón Torres 'Ray' y Pareja. A pesar de las repercusiones, ninguno de los implicados ha dado ningún tipo de explicación.

"A mí me gustaría que algún día tuviera la ocasión de hablar con ellos. Ya ha pasado mucho tiempo y ya son mayorcitos para asumir lo que hicieron y decir, 'oye, yo me metí en esto por esto, por esto y por esto'", asegura Antonio G. San Martín, colaborador de 'Gigantes del Basket' en 'Anatomía de...'. "A nosotros también nos gustaría, pero no han querido (intervenir en el programa)", reconoce Mamen Mendizábal.

"22 años y sin que me pidan perdón. Yo no he hecho trampa, todo legal. Y yo sé que he ganado la medalla de oro en Sydney. Y ya está", concluye Pareja con una sonrisa.