El equipo de Ambulancias trata a un señor de 83 años "que se ha desmayado y no sabe por qué" durante las fiestas del Orgullo en Madrid. Tras hacer una revisión, los sanitarios averiguan que "se ha tomado dos vinos", de modo que le sugieren ir a un sitio tranquilo.
También, en la celebración del Orgullo, ayudan a un joven que sufre un trastorno que aumenta sus niveles de glóbulos rojos en sangre. La médico de Ambulancias le da la medicación que necesita para estabilizarlo y lo calman.
Siguiendo en una de las carpas del Samur en el Orgullo, Ambulancias recibe a un joven con una rotura del tendón rotuliano. El paciente afirma que se cayó tras una discusión con un chico: "Me ha dado un golpe. Le he recriminado el golpe y supongo que en la caída se me ha salido la rodilla". Para sorpresa de los sanitarios el joven afirma que siente un "dos" de dolor sobre diez, sin embargo, deben trasladarlo al hospital para una intervención quirúrgica.
Ahora llega un joven a la carpa de Ambulancias situada en Plaza España de Madrid durante las fiestas del Orgullo. Y tras hacerle una revisión, comprueban que ha tomado mucho alcohol. La situación se pone más complicada cuando el paciente afirma que toma "Diazepan", un medicamento que "sientan muy mal con el alcohol".
Los sanitarios de Ambulancias recogen a un hombre que ha sufrido un corte profundo en la pierna derecha durante las fiestas del Orgullo en Madrid. Al lavar y vendar la herida, el equipo médico lo envía a un hospital para que le cosan porque "ha traspasado la piel".
En otra carpa durante las fiestas del Orgullo de Madrid, Ambulancias recibe a un joven que reconoce haber fumado hachís, "pero no excesivamente". "La movida es que no he cenado nada y no sé si ha sido una bajada de azúcar o lo que sea", dice el paciente. Después de comprobar que no presenta ningún problema, el equipo de Ambulancias lo despide no sin antes recibir una petición: "¿No tendréis un croissant o algo?
La violenta reacción de un hombre que escupe a una enfermera y la intenta agredir
Cuando el equipo de Ambulancias recibe a un hombre en estado de embriaguez, el paciente reconoce haber tomado drogas y escupe a una de las enfermeras, de modo que deciden ponerle un cinturón para controlarlo. Tras comprobar que no presenta ningún riesgo lo reúnen con sus amigos para que se ocupen de él, es entonces cuando agrede a la enfermera.
Ambulancias atiende a dos personas que se han cortado en los pies: "Esto es nuestro día a día"
Debido a los cristales en el suelo durante las fiestas del Orgullo, los sanitarios de Ambulancias limpian y vendan el corte de un hombre y una mujer en la pierna. "Tienes seis horas para coserte", dice la médico de Ambulancias al hombre herido. Por otro lado, la joven presenta un corte pequeño en un dedo por lo que la vendan y la dejan seguir las fiestas. "¡Qué majos! Hasta luego", se despide la paciente.
Dejando la celebración del Orgullo, Ambulancias recibe la alerta de un choque en Madrid. Al llegar se encuentran a los dos hombres que iban en una de las furgonetas afectadas sin heridas graves. "Se han querido meter en el segundo carril y por esquivarles, han saltado los dos airbags". Tras revisarlos comprueban que solo sufren leves contusiones y contracturas.
En Oviedo, el equipo de Ambulancias acude a la llamada de un señor que se ha caído en la vía pública. Según cuenta el hombre, se mareó y tropezó cayendo al suelo en plena calle, lo que le ha producido varios cortes y heridas por toda la cara. Los sanitarios le tienen que llevar al hospital por un corte que se ha hecho en el labio y hay que coser.
El calor y la actividad física provocan un corte de digestión a una mujer que atiende Ambulancias
Además, Ambulancias tiene que atender a una turista que se encuentra mal y está en el suelo con vómitos y diarrea. Los sanitarios le toman las constantes y deciden trasladarla al hospital por un posible corte de digestión debido al calor y a la actividad intensa, según el equipo médico.
"Me he asustado al ver que estaba temblando": Ambulancias ayuda a un señor con fiebre y temblores
Por último, Ambulancias atiende en Madrid a un señor que acaba de salir del médico, pero que continúa con temblores en piernas, brazos, pecho y tiene fiebre. El señor quiere irse a su casa, pero los sanitarios no le dejan ya que anda inclinado hacia atrás e insisten en llevarle al hospital.