La enorme inundación provocada en el sur de Jersón por la destrucción de la presa de Nova Kajovka ha provocado que algunas minas queden varadas en el agua y vayan explotando a medida que impactan contra objetos y edificaciones de la poblaciones anegadas por el agua.

Rusia y Ucrania sigue acusándose mutuamente del derrumbe de la presa, situada en una zona estratégica ocupada por Rusia y en la que el río Dniéper hace frontera con la zona ucraniana, tan solo horas después de que se filtrara que Ucrania podría estar comenzando su contraofensiva.

Desde entonces, el río Dniéper no ha dejado de aumentar y se estima que puede anegar hasta 80 localidades aledañas a su ribera. Por el momento, ya hay numerosas localidades bajo el agua y los vecinos que aún quedan en la zona tratan de ayudar a evacuar las casas anegadas.

Sin embargo, algunas bombas han quedado varadas y, con la fuerza del agua, se han convertido en trampas flotantes. Así, en mitad de los rescates se pueden escuchar explosiones que aumentan aún más la tragedia de lo sucedido, tal y como se puede ver en el vídeo principal de esta noticia.