Antonio García Ferreras ha querido rendir un sentido homenaje en Al Rojo Vivo a los periodistas David Beriain y Roberto Fraile, asesinados en Burkina Faso cuando estaban rodando un documental sobre la defensa de los recursos naturales del país africano.

"Se estaban jugando la vida por hacer de esta profesión algo digno. Una profesión que permite que alguien pueda empatizar con las tragedias o con los dramas que están situados a miles de kilómetros. Una profesión que permite abrir esos debates profundos que necesitamos también como seres humanos. Ellos sabían cómo hacerlo", señala Ferreras.

"David recorrió 93 metros y miles y miles de kilómetros en Afganistán, Irak, en Pakistán, en Colombia, en Venezuela y en tantos y tantos lugares. Él iba en busca de los clandestinos, los narcos, los guerrilleros, los sicarios, los verdugos… y de las víctimas. Los que trabajamos con ese equipo de 93 metros, con su gente, sabemos muy bien cuál era su espíritu. El espíritu Beriain. Un huracán, un periodista como Roberto y como David, un periodista siempre en busca de la verdad", añade el director de Al Rojo Vivo, que también tiene unas palabras para sus familias. "Hoy tenemos muchos nombres en la cabeza, los de David, los de Roberto, los de Marías, los de Paula y por supuesto los de Rosaura. Ese espíritu va a seguir con su gente, con Rosaura, en esos 93 metros".

Un homenaje de García Ferreras, que recuerda también los minutos de silencio y aplausos que se han sucedido tanto en la Universidad de Navarra (en la que Beriain estudió y con la que mantenía un gran vínculo) como entre los periodistas del Congreso de los Diputados.