La previsión para estas elecciones generales es que la participación baje debido ala fecha en la que van a celebrarse. En Al Rojo Vivo analizan qué ha sucedido en años anteriores cuando la movilización ha sido más baja para saber qué partido podría ser el más beneficiado.

Lo cierto es que las elecciones generales siempre se han caracterizado por una mayor movilización frente a otros procesos electorales, aunque nunca antes se habían celebrado en el mes de julio como ocurrirá en esta ocasión.

De todas las que se han celebrado hasta la fecha, la participación nunca ha sido inferior al 65%. De hecho, las elecciones generales en las que menos personas han ido a votar han sido en las de 2019, con un 66,2%, ganando el PSOE.

Esta es la única ocasión en la que la baja participación parece que benefició al PSOE, y es que al analizar otras citas se aprecia cómo en los años en los que ha habido una menor movilización ha ganado el PP. Esto es algo que ocurrió en 2016, con una participación del 66,48%; o en el año 2000, donde fue menor al 69%.

De esta forma, los datos reflejan que los socialistas han obtenido triunfos electorales en cuatro de las cinco elecciones con mayor participación, mientras que el PP ha ganado tres de las cuatro elecciones en las que la movilización fue menor.