Cuando está a punto de cumplirse el primer aniversario de la guerra en Ucrania, las posiciones de ambos bandos, especialmente la de Rusia, están cambiando, modificándose así las estrategias empleadas hasta ahora para que el tablero se incline a favor de uno u otro bando. Así lo ha valorado el experto y codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH), Jesús Núñez Villaverde, quien cree que estas acciones militares recuerdan a otras de muchos años atrás.

"Más que a la Segunda Guerra Mundial, nos estamos retrotrayendo a la Primera, con operaciones que tienen mucho que ver con guerra de trincheras, pues los avances son mínimos desde hace meses", ha considerado el experto, que cree que, en "términos generales, Ucrania mantiene la iniciativa, pero en algunos casos concretos, como Bajmut, ahora mismo su defensa es prácticamente insostenible". Algo que, según la opinión del experto, vendría muy bien a Moscú en un momento como este.

En concreto, Villaverde ha subrayado que "las tropas rusas, a base de reiteración de esfuerzos, pueden acabar consiguiendo algo que presenten como una victoria, puntual o parcial, con vistas a ese primer aniversario de guerra". Eso sin olvidar, según ha insistido el experto, que "Rusia se está preparando para una gran ofensiva a gran escala, y lo está haciendo al estilo ruso: el aplastamiento. Es intentando usar su ventaja en términos demográficos, de cuánta carne al asador se pone en el frente de batalla".

Unas maniobras que, según Villaverde, no están pasando factura político-social a Putin: "Hablamos de un individuo que ha consolidado su poder a base de eliminar a toda la oposición parlametnaria, de eliminar a todos los medios de comunciación independientes, críticos, que puedan denunciar lo que está ocurriendo. Y a base de eliminar la más mínima posibilidad de sociedad civil organizada. Podemos entender que Putin cuenta con un colchón amortiguador y eso le da margen de maniobra para seguir con la pauta militar rusa".