Un cámara de televisión
de Telemadrid recibió varios puñetazos en la cara al ser confundido con un
operador de TV3 en la concentración en apoyo a
la mujer que fue presuntamente agredida en el parque de la Ciutadella por
retirar lazos amarillos.
Según ha relatado el propio agredido, la agresión comenzó cuando el cámara pidió a una
señora que dejara de grabarle y de darle golpes en las piernas, ya que al ver
que llevaba una prenda amarilla y gomas del mismo color en la funda de la cámara pensó que trabajaba para TV3.
Entonces se organizó un revuelo entre algunos de los presentes, que comenzaron a
gritar y a empujar al cámara de televisión, hasta que dos hombres de mediana
edad le propiciaron diversos puñetazos por detrás que le impactaron en la
cara.
El agredido, que fue atendido por una ambulancia, ha presentado una denuncia por los hechos ocurridos. El operador ha asegurado que en manifestaciones independentistas también había sido increpado, aunque sin llegar a la agresión física, y ha afirmado que debido a este último episodio, sumado a otras situaciones de tensión que ha vivido, dejará el trabajo y regresará a su localidad de origen, Valencia.