Con motivo de la cumbre del G7 la frontera entre el País Vasco y Francia Todo ha quedado blindada policialmente: más de 4.000 ertzainas, la mitad de la Policía vasca, estarán operativos para la cita en el país galo.

Cerca de Biarritz, donde tendrá lugar el congreso, se celebra la 'contracumbre'. Concretamente en Irún, donde diferentes organizaciones se dan ya cita para debatir sobre los problemas que consideran importantes y donde activistas muestran su rechazo a las políticas mundiales actuales.

Es el caso de G7EZ, una plataforma de movimientos sociales que se muestra en contra del G7 porque, según explica su portavoz Anabel Sanz, "defiende un modelo político social y económico que va en contra del planeta, de la igualdad y la solidaridad".

Además, porque, dice, "defiende un modelo capitalista y heteropatriarcal que es dañino para las personas y para el planeta".

En los encuentros que mantienen, según explica Sanz, "planteamos otros problemas como la solidaridad o el feminismo...", y tienen "foros repletos de gente dispuesta a hablar y debatir alternativas al modelo de las grandes potencias".

Éstos debates están relacionados con diferentes temas sociales, por ejemplo: "enfocados a la acogida de refugiados, propuestas sobre la soberanía alimentaria, propuestas feministas y solidarias".

Sobre la cumbre oficial dice que "no se puede confiar porque ha habido diferentes cumbres en las que se han prometido grandes cosas que se han incumplido". "Se reparten el mundo y defienden los intereses de las multinacionales y los gobiernos", critica .

Por eso, les lanza un mensaje de "no rotundo": "Si estuvieran cerca del pueblo no habría tanta protección policial como la hay".